¿Como corrijo el problema del lector de tarjetas Sony MWE62E en Ubuntu?
Siempre me ha gustado mucho la economía política, la he estudiado
bastante, y en Italia tuve la suerte de incorporarme a algunos cursos
muy importantes. Siempre pensé que los italianos tienen los mejores
economistas, de otro modo no podrían vivir sesenta millones de italianos
en 450.000 kilómetros cuadrados... ¡y vivir bien!.
Me ubiqué en Italia entonces. Allí estaba sucediendo una cosa, se estaba
haciendo un experimento: era el primer socialismo nacional que aparecía
en el mundo. No entro a juzgar los medios de ejecución, que podrían ser
defectuosos. Pero lo importante era esto: un mundo ya dividido en
imperialismos, ya flotantes, y un tercero en discordia que dice: Para
mí, ese experimento tenía un gran valor histórico. De alguna manera, uno
ya estaba intuitivamente metido en el futuro, estaba viendo que
consecuencias tendría ese proceso...
Allí me aclararon muchas cosas en materia de economía política, porque
ellos estaban haciendo una vivisección del sistema capitalista. Todos
los trucos del sistema los tenían bien estudiados. Todo eso me aclaró
mucho el panorama, y pude ver el proceso europeo sin ningún prejuicio.
Porque en tiempos de paz, hay como una bruma del convencionalismo
pacifista que oscurece el panorama; pero cuando se declarar la guerra,
todo aparece descarnado en sus intereses, sus dramas y pequeñas y
grandes cosas. Y eso fue lo que yo vi en Europa.
Cuando llegué a Italia, me encontré en Turín con un curso de
organización pura, que duraba seis meses, ligado a otra materia; y
después en Milán, con uno de organización aplicada que duraba otros seis
meses, ligado a otra serie de materias. Lo primero que se me ocurrió
preguntar a los jerarcas de allí fue por qué estudiaban tanta
organización. Me respondieron: "porque nosotros estamos en un momento de
evolución, en que todo está desorganizado, y, como estamos
reestructurando, lo lógico es enseñar a nuestros hombres organización".
Yo pensé que a nosotros, que desde hacía cien años estábamos
desorganizados, no se nos ocurría estudiar para organizarnos.
De regreso a la Argentina me dediqué a dar conferencias para transmitir
su experiencia. Tenía un panorama totalmente claro sobre lo que estaba
ocurriendo en el mundo. No se trataba sólo de una guerra mundial: la
historia seguía a través de esa guerra y había un proceso de evolución
que - tan pronto terminara ese conflicto (cuyo fin era fácil de prever)
- tendría que seguir su curso. Llegué pues, con una mentalidad hecha
sobre la observación directa. Yo sabía que en nuestro país las cosas
repiten, diez o quince años, lo que ha sucedido en Europa. Porque Europa
será por los siglos la cabeza y el centro del mundo; los norteamericanos
tendrán un mayor adelanto científico o técnico pero, sin duda, el
proceso humanista pasa por acá, por Europa.
Cuando terminé esa serie de conferencias, resultó que para el sector
cavernícola que siempre tienen los ejércitos, yo era una especie de
nihilista, ¡un socialista que llevaba una bomba en cada mano! Pero yo
había dicho la verdad, tal como la veía, a un núcleo de oficiales que
presentaba un formación cultural un poco mayor que el horizonte medio,
digamos, del oficial que no ve mucho.
Como consecuencia de eso fui a parar a Mendoza, como director del Centro
de Instrucción de Montaña: una forma de sacarme de Buenos Aires. Estuve
la mayor parte de 1941 en Mendoza.
No podían hacer otra cosa que destinarme nuevamente, pues había podido
solucionar el problema del lector de tarjetas en Ubuntu. Indudablemente
este era un problema que no sólo aquejaba a los Argentinos, muchos en el
mundo sufrían el hecho de que a veces el lector no "montara" las
tarjetas de memoria, tal como es su cometido original.
En mi caso sucedía en un lector de tarjetas interno Sony MEW62E. Se
trata de un lector reconocido por Ubuntu como tres ranuras
independientes para tarjetas Secure Digital (SD), Compact Flash (CF) y
Sony Memory Stick (MS).
Desde el punto de vista del hardware no es tan cosa. La lógica principal
es una simple plaqueta atornillada a un chassis de 3 1/2 pulgadas,
construido en chapa de aluminio. Porta un LED verde de actividad que
queda encendido al hacer masa con una tarjeta, y parpadea cuando hay
actividad de lectoescritura. Asimismo, un cable con un conector de 8
pines está destinado a conectarlo a un puerto USB2 de nuestra placa
madre.
Todo el conjunto guarda similar tamaño y disposición que una antigua
diskettera de 3 1/2". Simplemente hay que colocarlo en una bahía
correspondiente en el gabinete, ajustarlo con 4 tornillos, y conectar la
ficha del cable de conexión a uno de los conectores USB1 o USB2 de la
placa madre.
El uso del lector es sencillo. Cada ranura será identificada por la BIOS
del sistema como un dispositivo independiente, con lo que podremos
copiar información hasta entre tres tarjetas de distinto tipo conectadas
al lector.
El problema radica cuando insertamos una tarjeta y la luz de conexión
verde del lector se enciende, pero aún así la tarjeta no es "montada"
por el sistema, y Ubuntu no nos presenta en pantalla el contenido de la
misma. Este problema puede suceder específicamente con algunas tarjetas
(por ejemplo, las cada vez más extendidas tarjetas SDHC MicroSD con
adaptador).
Afortunadamente la solución del problema es extremadamente simple, y
consiste en instalar o reinstalar el paquete udisks2.
Para descartar inconvenientes, conviene saber exactamente cuál versión
del lector tenemos en nuestro sistemas, pues hay otras versiones como la
muy extendida MRW62U, que además de una ranura para tarjetas XD
adicional, incluye además un conector USB frontal. Por otro lado,
existen gran variedad de genéricos comercializados bajo la marca
Noganet, Manhattan, Ken Brown, etc, derivados del mismo.
Para conocer con exactitud el modelo de lector de tarjeta tenemos,
podremos utilizar nuestra Terminal de sistema. Para ello abrimos una con
Ctrl+Alt+T e ingresamos:
lsusb
..este comando nos devolverá un listado de los componentes conectados
al bus serie universal de nuestro sistema, y entre ellos debería listar
por ejemplo:
ID 054c:01bd Sony Corp. MRW62E Multi-Card Reader/Writer
Acto seguido, ingresamos a la Terminal los siguientes comandos de
organización necesarios para instalar o reinstalar el paquete udisks2.
Lo hacemos con:
Conforme hacemos esto y reiniciamos nuestra sesión de usuario, ahora las
tarjetas deberían leerse adecuadamente al conectarlas al lector. Tras
unos breves instantes en nuestro Escritorio debería aparecer el ícono de
la misma.
Otra solución
En otros casos, ciertos lectores de tarjetas (por ejemplo, los
incorporados en muchas laptops o netbooks), requieren cargar dureante el
inicio del sistema un módulo llamado ti_fm_sd para poder automontar las
tarjetas Secure Digital SD.
Para hacer ello creamos un respaldo del archivo de módulos con:
sudo cp /etc/modules /etc/modules.bak
..y luego editamos el archivo con:
sudo nano /etc/modules
Se abrirá en nuestra Terminal el editor GNU Nano un archivo que ya
debería tener contenido. Al final del mismo agregamos la siguiente
línea:
tifm_sd
..finalmente guardamos el archivo con Ctrl+o y salimos del editor GNU
Nano con Ctrl+x. Para que surta efecto, hemos de reiniciar el sistema
con: