PIRATERIA

Del tema de la piratería puedo hablar únicamnet como testigo de uso y en
base a mi ya nebulosa memoria RAM, pero no como dueño de negocio ni nada
por el estilo.


8 BITS.

Cuando compraba software de 8 bits para la Drean Commodore 64, en los
80s y muy principios de los 90s, SIEMPRE FUE software pirata. Te vendían
en comercios de insumos de oficina en un principio, pero luego fueron
apareciendo los típicos antros o locales chicos en galerías o sótanos.
No existían grandes emporios de la computación, ni Garbarinos ni
CompuMundos. En todos estos localcitos los dueños te copiaban el
software, pero no te decían que era ilegal: era LO QUE HABÍA.

La C64 era un ecosistema de bajo costo. Si bien en el exterior podía
haber productos que contaban con protección anticopia, el orgullo de
estos locales a lo sumo era tener un software "antes que los demás". Le
hacían el cracking, una técnica de programación para saltear la
protección anticopia que podía llegar a tener, si es que el productor
tenía la mala fortuna o desatino de hacerlo.

Pero la realidad era que ellos no tenían el concepto de "software legal"
o "copia ilegal". Yo en particular NI SABIA QUE EXISTÍA. Comprendía que
alguien hacía estos programas en el extranjero y que los "crackeaban"
acá para ponerles publicidad y fanfarronear (cosa que salía en las
pantallas de inicio), pero la realidad es que no podías "comprar" el
disco original, ni tampoco nunca jamás los vi. No venían ni en caja ni
tenían manuales impresos algunos. El software era en un 99,95% en
inglés. El dueño del negocio a lo sumo tenía un original (yo creo que ni
siquiera, se manejarían con copias, donde compraba nunca ví que pusieran
software original ni aún "en vidriera" para caretearla).

COPIAS PROPIAS

La C64 nacional traía una pequeña documentación anillada en castellano,
pero no explicaba "cómo copiar" software entre discos ni mucho menos. Te
explicaban como conectar la máquina, programar unas pocas cosas en
BASIC, guardar un listado en casette usando el Datasette, y en el
diskette, y chau.

Las revistas que salieron después no tenían circulación nacional, los
kioskeros no te la traían, así que más que eso no había para aprender.
Fui consiguiendo libros en la biblioteca, pero en gral eran viejos.

Por esas cosas de la vida, particularmente nunca tuye un datassette.
Sólo me prestaron uno durante un par de semanas. Tenía la diskettera. En
comparación era mucho veloz y cómoda que los casette. La C64 podía
grabar sus PROGRAMAS con ella, pero para copiar los discos entre sí
requerías tener DOS disketteras y un utilitario de copia, a los que les
decían copiadores, turbocopiadores o "turbos". Yo en principio lo
desconocía totalmente.

Era obvio que si usabas casette los podías copiar un doble casettera. A
finales de los 80s eran carísimos, mas que el datasette). Si ponías el
casete en un grabador podías escuchar los chirridos del audio, ¿quién no
hizo eso para probar?

Yo iba a comprar a un lugar que se llamaba DANIUS CLUB sobre la calle
Entre Ríos, propiedad de un tal Ricardo Estrella. Un hacker gordo como
el de las películas, con barba y un "centro de comando" con muchas
computadoras de 8 bits, y que te atendía "de espaldas" mientras tecleaba
en 8 computadoras a la vez. El tipo editaba un catálogo impreso en un
papel térmico (eran las impresoras raras de la época) y en ese catálogo
- que te cobraba algo así como 600 pesos de hoy - ponía todos los juegos
y utilitarios, y un código con el espacio que ocupaban. Esos hacían a la
"categorías de precios", pero el tipo ni siquiera te cobraba así, no le convendría.

Me explico: En cada diskette de C64 tenían Lado A y Lado B, y en cada
uno podías meter unos 12 o 15 programas simples, o tres o cinco de los
programas "grandes". El gordo calculaba qué te convenía poner en cada
lado y te armaba los discos. A veces te "regalaba" juegos para completar
los lados, y te "recomendaba" algún juego que vendía mucho. Pero nunca
te explicaba a vos cómo copiar, a pesar de que se lo pidieras. xD

Generalmente lo que yo hacía era comprar cajas de discos de 5 1/4
(llegué a tener mas dos docenas de cajas seguro, y cada una traía 10
discos.). El tipo realmente cobraba LOS DISKETTES; y el "adicional" que
cobraba por el software no era grande. Naturalmente él no te decía que
era ilegal. Pero recuerdo que me llamaba la atención la relación de
precios. En el caso de la C64 el disco virgen no tenía sentido
prácticamente. Suponete que la caja de vírgenes salia $900, y llevando
tres cajas enteras con software copiado te hacía rebaja por cantidad y
cobraba $1.100.

Mas adelante compré el FastLoader. Era un cartucho aceleraba muchísimo
la disketera, y traía un menú que se activaba con una hotkey triple,
pero el cartucho no traía manual alguno, nunca lo supe usar más que para
lo básico que era acelerar la diskettera. Nunca conseguí que nadie me lo
explicara (ni siquiera donde lo compré). Supuestamente traia cosas como
para encadenar disketteras o copiar entre ellas, configurarlas y
dejarlas copiando. Pero realmente no tenía la necesidad de copiar mi
software. Ni se me ocurrió venderlo tampoco, y más adelante explicaré
porqué.

El ecosistema de estas máquinas consistía en aplicaciones simples o
jueguitos queridos pero de poca monta. Era "platita de los nenes" y no
era un modelo de negocio que pudiesen imponer nada, los precios que
manejaban hacía que no le diesen importancia.

El negocio de estos tipos era comprarse varias disketteras y cajas de
discos y copiar software pirata, pero SER ELLOS QUIENES LOS VENDIAN. A
costa de eso preferían no sacar gran ganancia. Ni podían tampoco. Si
además te hubiesen perseguido legalmente, ni hubiese tenido sentido
hacerlo.

Sabía más de las casas de computación o locales que de quienes creaban
realmente el software. En C64, se hacían propagandas en gráfica de las
casas de computación, pero no de los desarrolladores. Se los conocía muy
poco. ¡Ni siquiera Microsoft! Existían Electronic Arts, Psygnosis,
Accolade, y varios estudios, pero en esta era realmente ni se les daba
pelota. No te decían "llevá este, que lo hizo el que hizo tal otro que
es buenísimo". Nunca me pasó eso a pesar de haber conseguido mucho
software.

En resúmen, en mi caso recuerdo que te cobraban el diskette y
prácticamente al software lo obsequiaban si llevabas en cantidad. Comprar muchos diskettes era una muy gran diferencia y significaba que el software en sí fuese regalado prácticamente...

Ya para finales de los 80s se empezó a difundir el tema de la piratería
informática como algo que te podía causar problemas. Muy sobre el final
de la era C64 te pedían que no dijeras que tenían software, te
facturaban discos virgenes. Pero de nuevo, el "pirata" en esa época era
el "pirata del asfalto", un tipo como Luis "el Gordo" Valor, aquel
asaltante de camiones de caudales. La piratería informática no existía
en los radares de la policía, tal vez se le daba algo más de importancia
a la piratería de música o la de videocasettes. A lo sumo se perseguía a
tipos que robaban los pasacasette del auto, a principios de los 90s
tener un coche con estéreo era lujoso...

Yo llegué a tener en total mas de 2000 títulos y en su momento me los
acordaba de memoria y en qué discos los tenía y todo. Pero TODO,
ABSOLUTAMENTE TODO el software era copiado, salvo el programado por mí
mismo. Pero nunca le "copié" a terceros que yo recuerde ni se me ocurría
vender copias para sacar 7% de ganancia: era perder el tiempo cuando
necesitabas tener el soporte físico, que era importado y caro.


PC

Ya cuando compré PC, la cosa empezó a ser un poco distinta. Te armaban
la computadora y recuerdo que la vendían bajo este mecanismo: cobraban
un "sobreprecio" a empresas, pero si ibas particular podías hacer que no
te lo cobraran. Ese sobreprecio naturalmente hacía al software, pero
realmente nunca te hablaban de su copia ilegal, sino que aducían una
suerte de cánon que le cobraban a empresas. Les daría vergüenza cobrar
por el software. Te decían "no, si usted es particular, no se lo
cobramos. ¿es particular?" Y todo el mundo decía que sí, lógico. Te
ponían trucho el sistema operativo, pero ya hablaban del software con
cánon, para demostrar. Lo pagaban "las empresas multinacionales". Te
hacían elegir entre MS-DOS y el Digital Research DR-DOS y había
"hinchadas", pero ninguno de estos hinchas de Bill o de Gary les pagaron
un pancho en la Argentina.

Recién aquí fue cuando nos fuimos dando cuenta de las empresas que
hacían software, sobre todos las de oficina (Lotus, Borland, dBase, y
Wordperfect, y Microsoft por allá atrás, etc). En juegos estaban los
mismos que en C64: Electronic Arts, Psygnosis, Acccolade mas adelante
MicroProse, Sierra, y los LucasArts. TODO eso se pirateaba sin asco,
porque no podías ni existían copias legales en "físico" que comprar a
usuarios particulares.

Coincide con la aparición del "shareware" como propuesta de software
barato en el país. Realmente tenía menor calidad técnica que el software
de entonces, pero lo podías copiar libremente, prestarlo etc, con lo
cual te decían que era mejor porque no pirateabas. Esos venían realmente
en un diskette manufacturado como la gente y puesto en un blister
plástico. Te puedo decir entonces que muy probablemente el primer
software legal que haya comprado realmente se deba a esa modalidad, y
lo tengo aquí en un cajón: el MUSIC TRANSCRIPTION SYSTEM.

Estamos hablando ya de 1990-91. Ya existían negocios que solamente se
especializaban en insumos y software de oficina y venta de hardware. Las
cuevas y galerías siguieron estando y se especializaban en jueguitos. Me
acuerdo de REAL TIME y de RED POINT que progresivamente pasaron a
catalogar para PC. Pasó mucho tiempo, pero me hago la idea de que
estaban cerca, sobre calle Santa Fé (tal vez una frente de otra? no
recuerdo). Esas eran famosas ya porque disponían de cracks y pantallas
de inicio. En una de las dos (no me acuerdo cual) te atendía un tipo
raro, un flaco muy fumador disfrazado con botas texanas y sombrero, pero
que jugaba jueguitos para nenes. Una bizarreada el chabón. Bah, toda la
scene era bizarra.

Con respecto a las BBS y la distribución de software pirateado, lo
considero MUY marginal. No quiero decir que no existiese, pero el costo
la hacía imposible de competir realmente en cuando al software bueno o
utilitarios. Como primer experiencia recuerdo haber usado un programa de
FTP desde ARPAC (año 89/90) y bajar software con eso otro software que
te recomendaban mucho para usar el sistema, pero en ese entonces ni lo
consideraba ilegal, ni yo ni los demás tampoco. Lo ilegal era conectarse
a través de los nodos de Pérez Companc (o sea que le cobraran a MaGoyo
el costo del pulso, pero no el software...). Pero eso te lo explicaban
casi extraoficialmente la gente de ARPAC. Recuerdo que la gente que se
movía en ARPAC te hacían bajar lo que era el primer Pkunzip (el
deccompresor, que recién salía) y un programa de modem más nuevo, el
TeleMATE 2, que podías usar para conectarte a otras redes y BBS (lo
instalé en la biblioteca desde donde me conectaba).

Ya para el 91 cuando tuve PC las BBS empezaban a aparecer muy
progresivamente, pero ya no usaban FTP, sino que por entonces usaban
xmodem o zmodem (protocolos diferente que sólo era efectivo para
comunicación por módem). Usaba este TeleMATE todavía. El zmodem era la
cosa del momento, pero yo NUNCA subí un software por un tema de coste de
las comunicaciones y porque no tenía sentido.

En general por aquel entonces las BBS locales colgaban poco software y
de mala calidad. El mejor programa pirateado que bajé de BBS fue el
Master of Orion 2 de Microprose (juego), de Antares BBS y me llevó algo
así como 45 minutos un domingo, a 14.4 kilobaudios por segundo. Te
equivalía a lo mismo que si lo comprabas físico en disquette, con una
gran diferencia... que no comprabas ni te quedaba el diskette. En
resúmen, salías perdiendo! Si hacías la descarga un día hábil perdías
como en la guerra, porque la comunicación te costaba el doble. Otro que
me bajé y recuerdo ahora fue un shell de DOS más avanzado para MS-DOS,
el 4dos 4.

El resto ponía basura shareware de poca relevancia (diskettes de 360K),
que ya no eran atractivos. Nunca ponían un "Office"; descargar eso desde
BBS a 14.4 o a 28.8 kilobaudios te hubiese llevado muchas horas, y el
costo de eso en los 90s era como si fuesen unos 10.000 pesos de hoy.

Para el 92 mas o menos ya se jodía con el software legal en las empresas
más grandes, las multinacionales que venían al país. Pero en las locales
nadie les daba bola. Los juegos de PC se siguieron pirateando
tranquilamente.

Para mediado de los 90s, ya todo eso desapareció. En la feria
Computación 93 que se hizo en el predio de La Rural, salió como novedad
el CD ROM, Estos tipos tenían un stand y habían sacado lo que - decían -
era el primer título editado en la Argentina en CDROM. Era toda la
biblioteca legal argentina (código penal, civil, comercial, etc) en un
disquito. A mi eso no me interesaba, pero lo interesante era que habían
traido las lectoras con la plaqueta controladora ISA necesaria para
vender todo el paquete completo, que no estaban en ningún lado (fueron
los primeros en traerlas al país). Como la venta de la biblioteca
jurídica les estaba quedando de clavo, cunado terminó la exposición
consegui que me vendieran una ahí nomás, prácticamente al costo de EEUU.

El CD ROM técnicamente eran otra cosa. Al año siguiente explotaron y
surgieron cadenas de venta como la CD Mundo, que tenía cuatro sucursales
en Capital. El CD-ROM permitía meter 650MB en lugar de 1,4, y el
software era muchísimo más vistoso.  Eso terminó aniquilando la
piratería en diskettes. La inexistencia de CD-R ni grabadoras paró un
poco la copia, pero recuerdo que hasta había compilados de soft
pirateado para DOS en CD que vendían en el centro (te ponían 200 juegos
en un CDROM). Cedió un poco hasta que aparecieron las grabadoras, mas o
menos por el año 1997.

Ya a partir de eso se da un segundo período de "Edad de Oro", y luego se generaliza. Finalmente con la internet deja de tener sentido el físico y la piratería ya se pasa a hacer por descarga directa. Ahí surge el Emule, y los torrents y los servicios centralizados como el MegaUpload y las nubes.